Directivos de los centros de San Juan de Dios en la Provincia Bética celebraron esta semana una reunión destinada a debatir la gestión sanitaria en tiempos de crisis económica. La Institución apuesta por mantener su actual modelo de asistencia, basado en la relación mediante diferentes fórmulas con las administraciones públicas “porque compartimos el interés fundamental de atender el derecho de todos los ciudadanos a la sanidad”, según afirmó el Superior Provincial, Julián Sánchez Bravo.
 

La Provincia Bética de San Juan de Dios integra más de 20 centros (hospitales médico quirúrgicos, colegios de educación especial, hospitales psiquiátricos, centros docentes universitarios, centros residenciales, comedores sociales y centros de acogida) en Andalucía, Canarias, Madrid y Extremadura. Como institución sin ánimo de lucro, el director general de Centros, Juan José Afonso mantiene que “a pesar de los tiempos que corren basamos nuestra fuerza en valores y principios fundamentales y compartidos por todos. Este es nuestro hecho diferencial y nuestro trabajo es mantenerlo ante los financiadores y la sociedad en general”.

Expertos en Economía y Salud coinciden en afirmar que San Juan de Dios aporta este valor añadido de gestión integral (que atiende todos los aspectos de la salud desde la infancia hasta la etapa final de la vida) y la implicación de los profesionales a un proyecto que apoya por encima de todo al paciente y su entorno. La Economista Beatriz López Valcárcel recordó que la Ley de Dependencia ha generado 1,5 millones de solicitudes y San Juan de Dios “es uno de los principales valedores de los gobiernos autonómicos para gestionar el derecho de estas personas a recibir asistencia”. A pesar de ello, recordó que “son tiempos difíciles también para las organizaciones no lucrativas y sugiere reforzar las vías de financiación a través de las donaciones privadas a través del marketing social.

Otro de los expertos asistentes a la jornada, el economista consultor sanitario del Banco Mundial, José Martín, destacó que uno de cada dos españoles vive bajo el umbral de la pobreza y esto aumenta la afluencia de ciudadanos a centros del perfil de la Orden, como comedores sociales o centros de acogida.

El intercambio de experiencias contó también con el testimonio de Mariano Guerrero, director de Proyectos de Ribera Salud, una plataforma empresarial que cuenta con cinco concesiones administrativas en la Comunidad Valenciana. Sus hospitales siguen un modelo concesional  como forma de colaboración público-privada basada “financiar el derecho de recibir sanidad, no de producción ilimitada de recursos”, según explicó,

En opinión de Mariano Guerero la tendencia es salir del modelo de servicios sustitutorios basados en la producción porque “es el más insuficiente e insolidario de los que existen”.  El ahorro viene determinado por la previsión de los costes y el apoyo en redes de prestación de servicios sanitarios externas, lo que permite “transferir los riesgos a otros”. Por otro lado, es un modelo que posibilita conocer volumen real de pacientes y que incentiva a los profesionales que eviten la sobreutilización del sistema

España cuenta con un 10% de población dependiente, dato que se multiplicará por tres en 2030 debido al envejecimiento de la población y el aumento de la esperanza de vida. En este contexto se hacen necesarios dispositivos que den respuesta a la cobertura este colectivo. La Orden de Juan de Dios plantea un modelo de atención basado en la integralidad, la orientación al binomio familia-paciente y la mejora continua bajo criterios de eficiencia y eficacia basados en la evaluación.