Sesión formativa en Tenerife sobre la muerte súbita
La coordinadora de la Unidad de Cardiología Deportiva del Hospital Clínic de Barcelona Marta Sitges y Pablo Domínguez, Jefe del servicio de Cardiología del Hospital San Juan de Dios de Tenerife, han ofrecido una sesión formativa sobre cardiología deportiva en el referido centro tinerfeño.
El objetivo ha sido perfeccionar los conocimientos de los profesionales sanitarios en esta área. La especialista del Clinic de Barcelona ha indicado que es fundamental que se extiendan las revisiones médicas preparticipación, es decir aquellas que se realizan antes de practicar algún deporte, a todas las personas que hagan ejercicio físico para evitar riesgos en la salud como la muerte súbita. “En la actualidad no todos los deportistas no se someten a este tipo de pruebas, ya que prácticamente está limitadas a los deportistas de élite”, indicó.
A través de este curso, denominado Deporte y salud cardiovascular organizado por las Sociedades Canarias de Medicina de Familia y de Hipertensión y Riesgo Vascular en colaboración con la Unidad de Atención al Deporte del Hospital San Juan de Dios, se abordaron cuestiones como los beneficios y riesgos de hacer deporte después de los 40 años, y las revisiones preparticipación. Además, Sitges habló sobre las recomendaciones de los consensos nacionales e internacionales en la materia y ejemplificó valoraciones a deportistas atendidos en su centro. En este sentido, Marta Sitges explicó que el tipo de revisiones puede variar.
“Como mínimo se debería hacer una entrevista clínica y una exploración física en base a doce puntos fundamentales, entre ellos, interrogar sobre la existencia de antecedentes familiares de determinados síntomas y la búsqueda de signos que hagan sospechar que existe una enfermedad cardíaca de base, lo que puede suponer un problema para la práctica del deporte, junto con algunas exploraciones complementarias básicas”, explicó la cardióloga.
La edad no determina por si misma el tipo de revisiones, dado que influye mucho la intensidad con la que se practica el deporte. Así, Sitges matizó que “no es lo mismo salir a caminar un par de horas a la semana que correr en bicicleta tres veces semanalmente, dos horas cada día”. De ahí a que este factor sí tenga relación con el tipo de revisiones de seguimiento que deben hacerse estos deportistas.
Sin embargo, la cardióloga puntualizó que la edad sí se tiene en cuenta a la hora de detectar el tipo de enfermedad porque entre las causas de muerte súbita en jóvenes que practican deporte la más frecuente es de tipo hereditaria, mientras que en personas mayores de los 35-40 años la más usual es la cardiopatía isquémica.
Según la coordinadora del Hospital Clínic de Barcelona la mayoría de personas que practican deporte están sanas y “no tienen nada en el corazón”. “Afortunadamente los casos de muerte súbita son infrecuentes, lo que pasa es que tienen un impacto mediático muy importante”. En el caso de que este tipo de fallecimiento esté relacionado con problemas hereditarios como malformaciones cardiacas o enfermedades congénitas, es conveniente evaluar a los familiares para detectar si alguno de ellos también padece esa patología y está a riesgo de sufrir una muerte súbita.
Unidad de Atención Integral al Deporte
El curso ha contemplado el análisis de casos reales de pacientes tanto en el Hospital Clinic de Barcelona como del Hospital San Juan de Dios de Tenerife. De esta manera, se ha mejorado el conocimiento que los profesionales tienen sobre la prevención cardiovascular, en la línea que viene desarrollando la Unidad de Atención Integral al Deporte que desde hace más de un año puso en marcha el centro tinerfeño. A través de esta área se promocionan los hábitos de vida saludables y se conciencia a la población de la importancia de llevar un seguimiento médico a la hora de practicar ejercicio y que éste sea el adecuado según las características de cada persona.
Por todo ello, se ha hecho hincapié en que el aumento de la actividad física y la práctica de ejercicio forman parte de las recomendaciones básicas de mejora de la salud de la población, en cuanto a sus beneficios cardiovasculares, para el aparato locomotor y para la salud mental.